Que llueva, que llueva.....Conducción segura en lluvia.

Al fin nos ha caído ese liquido elemento que tanto necesitamos para nuestra supervivencia, el agua, tarde, y en algún momento casi a cantaros, pero nos ha limpiado un poco esa atmósfera tan contaminada que nos rodea y que nos hace ver mucho más grises nuestros días.

Pero no todo es alegría cuando nos encontramos con el agua, a la hora de circular debemos guiarnos por unas pautas para que la conducción se haga más segura y no nos llevemos algún que otro susto por no guardar unos mínimos de seguridad.

En primer lugar debemos tener en cuenta que los neumáticos son nuestro principal aliado, así, si llevamos unos neumáticos en mal estado, con poca profundidad del dibujo, o una presión deficiente  de inflado nuestro agarre se verá mermado considerablemente, con el consiguiente peligro de deslizamiento al circular sobre una película de agua, pudiendo llegar nuestra distancia de frenado hasta el doble de la distancia de frenado en circunstancias de circulación normal con un pavimento seco.

También la suspensión nos puede jugar malas pasadas, pues una suspensión deficiente nos puede llevar a producir aquaplaning, (también nos puede suceder por ir excesivamente rápido o por una profundidad de dibujo deficiente), este efecto se produce por que la banda de rodadura del neumático, que debe estar en todo momento en contacto con el asfalto, en algún momento no lo está, con el consiguiente susto del conductor que nota que una parte del vehículo tira hacia un lado, lo que nos puede llevar a comportarnos al volante de una forma brusca.

Deberemos llevar las luces encendidas de nuestro vehículo, no para ver nosotros, si no para que nos puedan ver, deberemos llevar como mínimo las luces de cruce o corto alcance, solamente en caso de lluvia intensa podremos encender las delanteras de niebla.

Los limpiaparabrisas son fundamentales, por eso, una pequeña revisión, para comprobar que no estén rotos y que funcionan con normalidad nunca está de más, pero su uso no debe ser nunca al inicio de la lluvia, si no que deberemos esperar a que el cristal esté lo suficiente mojado para que así no nos lo rallen las escobillas por que puede estar lleno de polvo o tierra, o tirar del lavaparabrisas, para mojar lo suficiente el cristal y se limpie en lugar de rallarse.

Yen el interior?, en el interior deberemos tener cuidado con la posibilidad que se empañen nuestros cristales, para ello simplemente deberemos redireccionar  la salida del aire interior hacia el cristal empañado.

En resumen, si seguimos estas pautas nuestra circulación será más segura:

• Revisar los neumáticos, tanto la adecuada profundidad del dibujo para una correcta evacuación del agua del asfalto, como una adecuada presión de inflado, lo que nos llevará a un mejor agarre en cualquier circunstancia adversa.

• Cuidado al inicio de la lluvia, pues se forma una película con el polvo y los aceites que se encuentran en la carretera que hacen que esta este muy deslizante y resbaladiza.

• Haceros ver, usar el alumbrado de cruce, nunca las luces de posición solamente.

• Evitar pasar por encima de charcos, y si no lo podéis evitar, una vez rebasados presionar un poco el pedal del freno para secar los discos de freno y así tenerlos en buen estado para cuando los necesitemos.

• Guardar una adecuada distancia de separación con el vehículo que os preceda, ya que la distancia de frenado en este caso puede llegar a ser de hasta el doble de distancia que en circunstancias normales de circulación

• A su vez, esa mayor distancia os permitirá ver mejor la carretera pues evitara que el agua que despida el coche que va delante vuestro os impida la visibilidad de la vía.

• Revisar las escobillas de los limpiaparabrisas y los difusores de agua, la limpieza incorrecta del cristal os puede hacer que no percibamos correctamente los problemas que puedan existir en la carretera.

• En el caso de que la lluvia sea muy intensa se podría llegar a necesitar las luces de niebla delanteras para circular, pero en ningún otro caso.

• Cuidado al cruzaros con vehículos de gran tamaño o voluminosos, accionar el limpiaparabrisas a la hora de cruzaros con ellos, pues os rociarán con el agua que despiden de la calzada, lo que os impedirá la visión durante varios segundos.

• y por último, si veis que la cantidad de lluvia puede poneros en peligro, detener vuestro vehículo en algún lugar en el que estéis a resguardo de la lluvia y no pongáis en peligro vuestra seguridad ni la de los demás personas, y esperar a que disminuya la lluvia para continuar el viaje.

Imagen: Tus Trucos